Cuando desarrollamos un producto, es importante considerar cuál es nuestro objetivo y la manera en la que queremos obtener éxito, cómo y por qué. En el desarrollo de productos existen dos conceptos el MVP Y MLP. 

Un MVP es un producto básico, que tiene un enfoque funcional; su interés es resolver un problema específico de la manera más sencilla. 

Un MLP, por lo tanto, es un producto que no solo resuelve uno o varios problemas; tiene grandes diseños y crea una experiencia de usuario excepcional.  

En conclusión, para poder elegir qué estrategia es mejor para nuestro producto, si un MVP o un MLP, es importante conocer cuál es nuestro objetivo y en qué etapa del desarrollo nos encontramos. Podemos tomar como ejemplo algunas empresas, como Dropbox, quienes eligieron que antes de construir su producto, es decir, cuando ya tenían una idea, usar la estrategia del MVP, aunque actualmente ya tiene una experiencia de usuario más avanzada y el producto ya tiene un diseño. 

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